Desde el año 2018 se está ejecutando el Plan Antidrogas y Corrupción al interior de las cárceles del país. Iniciativa que, a nivel regional, se ha convertido en una exitosa estrategia para combatir delitos en los recintos penales, arrojando hasta la fecha más de una decena de personas detenidas que han intentado ingresar drogas a través de la modalidad del “peloteo”.
Al respecto, el Mayor Walter Navarrete, Alcaide (s) del penal de Huachalalume, indicó que “una de nuestras principales medidas es detectar e impedir el ingreso de elementos, especialmente drogas desde el exterior hacia el interior del establecimiento. Durante el 2019 tuvimos la mayor cantidad de detenidos, 15 personas que arrojaban la droga al penal, la mayoría de ellas son de nacionalidad extranjera”.
Esta detección se ha logrado mediante tres medidas adoptadas por Gendarmería: la puesta en marcha de un Body Scan de rayos X; la renovación de sus 530 cámaras de seguridad y el apoyo de televigilancia con los equipos aéreos de Seguridad Pública.
Son acciones que forman parte de una estrategia coordinada entre el Ministerio de Justicia, la Fiscalía, Carabineros, la PDI y la Subsecretaría de Prevención del Delito.
El Delegado Presidencial Regional, Ignacio Pinto, sostuvo que “este es un trabajo focalizado que atiende las dificultades que se dan en el entorno y que van, lamentablemente, en aumento. Sin embargo, esta planificación está arrojando resultados y mantendremos las medidas preventivas y la coordinación con todas las instituciones de seguridad públicas”.
Además, la Seremi de Justicia, Sara Contreras, agregó que “hemos incorporado el usos de estas tecnologías, entre ellas también el Rifle Cazadrones, para fortalecer la vigilancia, apoyando a que los procesos en el penal sean más ágiles”.
