El seremi (s) del Medio Ambiente, Sergio Troncoso, destacó que se eligió este lugar para realizar la caminata de educación ambiental, porque es un ecosistema con singulares características. “La desembocadura del Río Limarí al igual que los otros humedales costeros de la Región de Coquimbo son importantes por la cantidad avifauna y biodiversidad que presentan. Estos humedales costeros son los que conectan el curso de agua continental con el marino y eso genera una situación especial y hace que las especies que llegan allí sean diferentes, varias de ellas estacionales o migratorias que vienen a alimentarse o nidificar aquí”, explica.
Añade que por su riqueza en biodiversidad y por su privilegiada ubicación, en la ladera sur del Parque Nacional Fray Jorge y en un sitio poco intervenido por la urbanización, es que este humedal está siendo postulado por Conaf como sitio Ramsar, una protección que entrega la Convención sobre los Humedales de Importancia Internacional a aquellos de valor natural y cultural por su diversidad biológica.
Manuel Rojas, coordinador regional de la Fundación Sendero de Chile, subraya que “el humedal de la desembocadura del Río Limarí es uno de los más importantes en la región, porque es rico en abundancia de especies. Podemos ver una gran cantidad de patos y chorlos playeros que lo hacen totalmente interesante para que sea un lugar resguardado”.
“Estoy maravillada con el lugar. No conocía la importancia de los humedales y aquí aprendimos el impacto que puede provocar la gente si no cuida estos espacios naturales. Una persona que pasa en moto divirtiéndose puede matar el 95% de una población de especies y eso es algo que yo ignoraba. También aprendimos que el humedal es parte de nuestras vidas, porque si las personas somos un 80% agua, esa agua viene de un humedal, por eso es importante difundir lo importante de cuidar estos lugares”, relató María Antonieta Cáceres, una de las participantes y miembro del Comité de Protección del Medio Ambiente y Animales de la comuna de Ovalle.
Durante la excursión, los visitantes también visitaron el bosque del Fray Jorge para conocer cómo ambos ecosistemas se vinculan. El humedal de la desembocadura del Río Limarí se ubica a unos 18 kilómetros de la Ruta 5 con el kilómetro 358 (a la altura del ingreso a Peñablanca). Posee una superficie aproximada de 68 hectáreas, espacio que es el hábitat de otras especies como la becacina, gaviota garuma, huairavillo, garza cuca, cururo, pato cuchara, cisne coscoroba, cisne cuello negro, cuervo pantano, entre otros.
PROTECCIÓN DEL HUMEDAL:
Sobre la protección internacional de este lugar, el Director Regional de CONAF, Eduardo Rodríguez, indica que “la postulación de sitio Ramsar del humedal ha avanzado favorablemente” y que justamente la próxima semana se reunirán nuevamente con los actores relacionados con el desarrollo económico y uso sustentable del humedal en las áreas de agricultura, turismo y pesca, lo que “permitirá dar forma definitiva a la ficha de postulación de sitio Ramsar”.
Respecto al cuidado de este sitio durante las vacaciones, el encargado de Higiene Ambiental del municipio de Ovalle, Pedro Muñoz, hace un llamado a quienes visitan el lugar a no contaminar este espacio costero. “La gente al no respetar ni valorar el lugar deja basura, así que el pilar fundamental para evitarlo es la educación. Hemos hecho cuadrillas de limpieza con alumnos y entregado folletería a los visitantes… Invitamos a los turistas que hagan una correcta disposición de los desechos en sus domicilios y no la dejen en el humedal ni en la playa”, insta.
