Los consejeros regionales Lombardo Toledo, Paola Cortés y Carlos Galleguillos se reunieron con los equipos directivos de ambos colegios, con quienes definieron algunas estrategias para abordar esta problemática, como gestionar una reunión con el alcalde de Coquimbo y con el sistema local de educación, para reponer el proyecto -en el caso de Guanaqueros- y desarrollar una iniciativa que permita dotar al Colegio Claudio Arrau de la infraestructura adecuada.
Marcia Castro, directora de la Escuela de Guanaqueros, dijo respecto de la visita que “nos pone muy contentos que se reponga el proyecto. Nosotros esperamos que el CORE nos apoye en agilizar la tramitación de este proyecto, para que no quede en el olvido. Estoy confiada que va a ser así porque vi su compromiso y sus ganas de ayudar a la escuela”, argumentó directora.
La escuela cuenta con una matrícula superior a los 300 alumnos en los niveles pre – kínder a octavo básico, atendidos por 20 docentes, además del personal administrativo y asistentes de la educación.
“Encontramos a una comunidad educativa muy comprometida. El compromiso del CORE es que este proyecto que tienen postergado se pueda materializar lo más pronto posible, lo que no es difícil si hay una voluntad política por el bien de la comunidad”, afirmó el consejero Lombardo Toledo.
Por su parte, la consejera y presidenta de la comisión de Educación y Cultura, Paola Cortes, comentó “creo que es muy importante poder concretar este proyecto del techado que tanto falta hace para las actividades educacionales de los niños, estamos todos conscientes de que es una real necesidad así que vamos a hacer todo lo posible para buscar los financiamientos donde corresponda”.
Colegio Claudio Arrau
En Coquimbo, los consejeros acompañados del director del Colegio Claudio Arrau, Carlos Videla, conocieron los espacios que la comunidad educativa tiene disponibles para construir un techado y otro para las actividades artísticas.
“Estamos hablando de la urgencia de un espacio techado y otro para el desarrollo de las actividades artísticas, que se ven limitadas por la falta de un espacio físico adecuado”, comentó el director Carlos Varela.
En tal sentido, el consejero Carlos Galleguillos dijo que la solución pasa por el trabajo conjunto con el municipio y sistema local de educación. “Yo creo que tenemos que tener una conversación con el alcalde para ver qué podemos hacer como Consejo Regional para que se cumpla el sueño de alumnos, profesores y apoderados de contar con un espacio techado y tener un colegio que entregue la oferta educativa de la mejor manera posible”.
El colegio tiene una matrícula de 840 alumnos de kínder a cuarto año medio. Los que son atendidos por 75 profesores y 42 asistentes de educación, lo que evidencia la necesidad de contar con un recinto adecuado para las actividades físicas y artísticas.
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