El fiscal de Coquimbo, Claudio Sobarzo, hizo un recuento de los medios de prueba que fueron claves para la condena de un sujeto responsable de los delitos de violación de morada, daños simples, femicidio frustrado y homicidio frustrado, hechos ocurridos los días el 19 y 25 de marzo de 2023 y el 6 de abril del mismo año.
La Fiscalía acusó y probó que G.A.D. llegó hasta el domicilio de la víctima en Coquimbo para ingresar a éste sin consentimiento, fracturó una ventana, pero no logró su cometido por la intervención de terceros. En tanto, el 25 de Marzo de 2023, alrededor de las 23:45 hrs., el acusado concurrió nuevamente al lugar a causar daños a una cámara de seguridad para luego retirarse del lugar.
La Fiscalía también acusó y probó que el día 6 de abril de 2023, alrededor de las 17:00 horas, el acusado dirigió su automóvil hacia la víctima, con quien mantuvo una relación sentimental, mientras ésta se desplazaba desde su trabajo a su domicilio. Al advertir este seguimiento, la víctima alertó mediante vía whatsapp a su hijo, quien, revisó cámaras y advirtió la presencia del sujeto.
Posteriormente, el acusado aceleró su automóvil a gran velocidad en dirección a las víctimas, subiéndose a la vereda con intención de atentar contra sus vidas e integridad física, atropellándolas a ambas.
El fiscal Sobarzo, dijo que los medios de prueba como “la prueba testimonial y el registro de videos que existía de 2 de los hechos más graves, que sería el delito frustrado de feminicidio y el delito de frustrado de homicidio” fueron los principales para probar la responsabilidad del sujeto.
“Ciertamente tenemos el testimonio de ambas víctimas, al menos 2 testigos presenciales del hecho y un registro de vídeo de las cámaras de seguridad, tanto de la casa de la víctima como de una casa que se encontraba al frente que registraban el hecho del 6 de abril”, añadió.
“Además tenemos la prueba testimonial de los hechos ocurridos el 19 y 25 de marzo, que también era parte de la acusación y que también se tuvieron por acreditados”, dijo el fiscal.
“El Tribunal acogió todos los tipos penales que propuso el Ministerio Público. El delito se cometió con la agravante de un contexto previo y habitual de violencia tanto psicológica como física, ya que se aportaron una serie de antecedentes que dieron cuenta que, aparte de los hechos del delito, como es la violación de morada y los daños hubo constantes acosos a la víctima, seguimientos en vehículos e incluso el sujeto fue al Colegio hasta la sala de profesores para hacer una denuncia ante la superintendencia de educación en contra de la afectada (docente) también con los fines de perjudicarla”, añadió el persecutor.
Tras el juicio, el acusado recibió sentencias de 15 años por femicidio frustrado, 7 años por homicidio frustrado y dos penas de 50 días de prisión por los otros dos delitos.
El proceso aún está con plazos vigentes.
